Las nuevas cámaras de vigilancia del cementerio tienen un ángulo muerto

• Un fallo en la instalación impide vigilar parte de su campo de visión
• Hasta que se solucione el problema será necesario pasar por un arco de seguridad para salir de Berichitos

Se acumulan los problemas en el cementerio municipal de Pamplona. Si hace unas semanas el camposanto saltaba a la palestra debido a unos robos acometidos en sus tumbas, hoy se ha conocido que el sistema de seguridad -instalado precisamente para evitar estos hurtos- tiene un defecto que impide controlar por completo sus nueve puertas de entrada. Así lo ha confirmado un agente de la Central de Coordinación de la Policía Municipal de Pamplona (CECOP) a este periódico, tras la primera prueba de grabación llevada a cabo durante la noche de ayer.

La noticia ha caído como una losa sobre Berichitos

Aunque el agente del cuerpo pamplonés no ha querido especificar la causa del error, un trabajador del cementerio de San José ha definido el hecho como "una cagada" y ha echado el muerto encima a la empresa instaladora, que ha preferido callar como una tumba disparando todo tipo de especulaciones en la calle e Internet. Por un lado, algunos tuiteros apuntan a una posible interferencia producida por la red antiincendios de la capilla ardiente, inaugurada también hace unos días, mientras otros optan por tomar al pie de la letra las palabras del funcionario necropolitano y señalan a las heces de las palomas como causa directa de la ceguera de algunas cámaras, adoptadas por las aves como aliviadero nocturno excretor.

Cuarto Milenio ofrece su colaboración

El programa televisivo de Cuatro capitaneado por Iker Jiménez, Cuarto Milenio, se ha puesto en contacto con el Ayuntamiento de Pamplona para brindarle su apoyo profesional en el momento en el que el consistorio lo considere oportuno. El escrito, facilitado por la Nave del Misterio, recalca el liderazgo de la empresa en su nicho de mercado y pone su experiencia y su tecnología al servicio de Joseba Asirón: "contamos con un equipo técnico de muerte y especialistas en psicofonías, radio y televisión con más de 666 horas muertas de rodaje en cementerios y hospitales abandonados. Más de once temporadas en antena nos avalan", termina el comunicado.