- El sujeto pasó cuatro horas sin toser, encogido en un balcón hasta ver la que montó
- El suceso tuvo lugar de madrugada y concentró a varios vecinos, viandantes y empleados de limpieza alrededor del individuo, al que se encontraban todos mirando
"Con mi cerebro de mosquito y una leve insinuación, me tragué lo que ella dijo... nunca me sentí mejor", confiesa embelesado Enrique V.A., el joven chantreano que en la mañana de ayer protagonizó uno de los incidentes más sonados de la historia de San Juan. Pese a no ser un barrio conflictivo, los vecinos de Donibane pasaron otra noche sin dormir debido a la situación límite en la que se vio envuelto este pamplonés de 27 años, en jake tras ser sorprendido a pecho descubierto contra la pared de un balcón.
Sofokao
El de la Txan ha querido ofrecer a la ciudadanía su versión de los hechos a través de The Foral Telegraph: "me la encontré esperando en un billar, con sus lentejuelas, y empezó a meterme fichas: que si 'dime cómo besas', que si 'bésame', que si 'sólo quiero tu boca'... Yo estaba borracho y me daba que esa noche iba a tirar del gatillo, así que le dije 'déjalo muñeca, no sé qué hacer contigo, ésta es una noche de rock and roll', y me volví con la cuadrilla. Imagínatelo en el acto: ni en el mejor de tus días te pasa algo así en Pamplona, y si encima ves que ella no para... ¿al final no es muy difícil claudicar, no?"
El sapo del cuento
"Salimos del bar y nos fuimos a su casa, ya que hacía frío y esa noche no era para andar por esas calles. Aunque me aseguraba que no estaba casada, no sé bien porqué pero tenía el presentimiento de estar tentando a la suerte, pues si aparecía el marido, me encontraría en un callejón sin salida", reconoce el -ya a esas alturas- animal caliente. "Para entonces yo ya estaba perdidamente enamorado de ella, e incluso le susurré 'soy tuyo, deja que esto no acabe nunca' al oído... pero justo en el instante en que me respondía que nos quedaba poco tiempo, va y entra su pareja por la puerta".
"Se nos fue la pasión por el ruido de la puerta"
"Estaba asustado, mi vida iba en ello y por instinto comencé a correr a ciegas. Había poca luz y lo poco que vislumbraba lo veía en blanco y negro. Estuve por salir corriendo a toda velocidad, pero vi de refilón al esposo por el pasillo y no me quedó otra que echarme en el suelo -de azulejo frío-, y escapar por el peldaño más cercano, el de la salida a la terraza. Me pasé cuatro horas desnudo y con frío en los pies esperando a que el marido se fuera del piso, pero una abuela del bloque de enfrente me descubrió y empezó a gritar 'míralo, píllalo, tira' a un policía municipal que pasaba por la calle, señalándome y pidiéndole sin compasión que me diera mi merecido. La mujer no paró de clamar venganza en la silla eléctrica hasta quedarse sin voz".
"No es demasiado tarde, aún queda un sitio para mí en la sociedad"
"Quería explicar públicamente lo que pasó porque ahora soy la oveja negra de mi familia, estoy acusado de exhibicionismo con nocturnidad y alevosía y no me gustaría pasar mis mejores años en clandestinidad, sin ver la cara a nadie y pidiéndote que no me silbes por la calle. Todo pasó en un abrir y cerrar de ojos, nunca he dado problemas de ningún tipo y me gustaría que mi altercado se quedara en un patinazo", ha suplicado la víctima del desengaño amoroso.
* Esta tontada es un homenaje a El Drogas, a falta de "un día nada más" de su histórico concierto de cinco horas en la Ciudadela de Pamplona. ¿Eres capaz de descubrir todos los títulos de los discos y canciones de su biografía que componen esta noticia?
Hahahaha por su puesto!!!
ResponderEliminar;)
EliminarTodos, todos!!
ResponderEliminarMuy buena la crónica...buenísima, me has sacado una enorme sonrisa!!
Muchas gracias susi-ka! Para eso lo hacemos!! :)
EliminarGenial!!!, Me ha encantado!!!
ResponderEliminarMuchas gracias Nona!!
Eliminarolle pues muy entretenida si señor, conocia la cancion y la letra..pero no esa historia.
ResponderEliminartuse en el tiempo the foral